El registro obligatorio de la jornada laboral para todos los trabajadores se encuentra en la agenda del Gobierno desde 2016. Impulsado por las demandas sindicales y habida cuenta de las recientes declaraciones de diferentes fuentes sobre este tema, 2019 puede ser el año clave en la que se tome una decisión al respecto.

Ante la posible aprobación de una normativa que obligue a las empresas a implantar un registro para poner coto a las horas extra no pagadas o fraudulentas y para controlar el creciente absentismo laboral, cuyo incumplimiento podría traer asociada una serie de importantes sanciones, las empresas y, más concretamente, los departamentos de RRHH deben estar preparados para implantar procedimientos y contar con herramientas tecnológicas adecuadas.

Así lo exponen desde DKINES que destacan la paradoja que trae consigo estas medidas, que permitirán registrar las horas de entrada y salida de cada trabajador, debido a que se aplicaran en un contexto “en el que el mercado laboral se está transformando y en el que se está brindado la posibilidad a los profesionales de trabajar bajo diferentes modalidades: medias jornadas, turnos fijos, turnos rotativos, bolsas de horas, teletrabajo, jornadas flexibles, etc”.

Siendo conscientes de esta complejidad y basándose en su experiencia como proveedor tecnológico especializado en soluciones Cloud para la gestión de Nómina y RRHH, DKINES ha lanzado seis recomendaciones para facilitar a las empresas gestionar con eficiencia el tiempo de trabajo de sus empleados y estar preparadas para los cambios normativos mediante el uso de la tecnología:

Identificar y normalizar las principales características de la fuerza laboral -horarios, jornadas, turnos, teletrabajo, movilidad de los trabajadores, etc.- para facilitar la identificación de los aspectos clave a gestionar en el control horario.

Integrar los turnos de trabajo con el control horario, las vacaciones, calendario laboral, la definición estándar del absentismo, etc., para automatizar la respuesta de incidencias, reduciendo la intervención humana y agilizando la gestión. “Esto permitirá a las empresas obtener estadísticas y registros fiables en tiempo real, desde un único entorno y de forma centralizada, favoreciendo la mejora continua”, explican desde DKINES.

Establecer contadores, de acuerdo a la gestión que se quiera realizar, para poder parametrizar las alertas necesarias para la gestión de presencia y ausencia, horas trabajadas, horas extras, horas compensadas, etc.

Integrar en un único sistema tecnológico de RRHH los datos de gestión del tiempo con las restantes transacciones, información y conocimiento de los empleados, para optimizar el uso de ese conocimiento para la búsqueda de una mayor eficiencia operativa y de gestión del recurso humano.

Centralizar la información (dónde está el dato, quién y cómo puede explotarlo) y descentralizar la gestión de los procesos. De este modo se empodera a los managers y se mejora la rapidez y exactitud de las repuestas frente a posibles incidencias, necesidades, imprevistos, etc.

Medir, ajustar y corregir aspectos que resultarán clave para mejorar los resultados.

No obstante, más allá de la gestión del control horario, DKINES dispone de un módulo de gestión del tiempo avanzada que garantiza el cumplimiento normativo. Además, permite a las organizaciones automatizar los procesos de alta carga administrativa asociados a la gestión del tiempo, optimizar la productividad individual y de los equipos de trabajo y proporcionar autonomía a los managers y empleados en la gestión de su propio tiempo mejorando sus posibilidades de conciliación, entre otras cuestiones.